La pasión de Juana de Arco (1928)

La pasión de Juana de Arco de Carl Theodor Dreyer, es un drama histórico de cine mudo que narra el final de la vida de Juana de Arco, y que es considerada por muchos como un auténtico film de culto. Dirigida con un ritmo solemne y majestuoso, y con un estilo emotivo y verosímil al estar basado en las actas originales del juicio real y el libro de Joseph Delteil, es una obra sobresaliente en la que el dramatismo de la historia y su calidad cinematográfica hacen mella en el espectador. Realizada de modo admirable y extraordinario, tiene un resultado eclipsante y excepcional que merece la pena comprobar. 

La fotografía en blanco y negro, está repleta de matices evocadores e imágenes hermosas y conmovedoras que cautivan magistralmente al público en una labor visual estéticamente inspiradora. La música, añadida en la reaparición del film, es bella y grandiosa, exaltando el dramatismo y estimulando al público con armonías emotivas y profundas que hacen un triste pero soberbio acompañamiento musical. Y los planos y movimientos de cámara, completan una admirable e inteligente labor técnica en la que se busca enaltecer la tragedia, con mucho uso de los primeros y primerísimos planos, y también con el reconocimiento, avanti, retroceso, barrido, detalles y rotación.

Las actuaciones, son inconcebibles e insuperables. Con Renée Jeanne Falconetti con hundimiento psicológico y gran impresión en uno de las mejores interpretaciones femeninas de la historia, y unos magníficos acompañamientos de Eugene Silvain, Maurice Schutz, Michel Simon, Antonin Artaud y André Berley en personajes detestables como jueces y miembros de la inquisición. Los cuales llevan unos vestuarios y caracterizaciones alusivos a la época en ropas humildes y bien cuidadas, al igual que los esmerados decorados que te transportan al momento y lugar en cuestión. 

El guion, escrito por el mismo director junto con Joseph Delteil, es histórico y está adaptado de los hechos reales, siendo por tanto conmovedor y profundo en una historia dramática e implacable, que penetra y provoca al público en su visionado, haciendo sentir la desesperanza del personaje principal en un trabajo absorbente y apasionante que deja marcado al espectador. Y que es llevado a cabo con una narrativa subtitulada antigua y clásica, que es insidiosa y oscura, marcando la desilusión con unas acusaciones sombrías y malvadas por parte de la inquisición. 

En conclusión, la considero una obra indispensable e imperecedera en el séptimo arte y una auténtica película de culto que muestra el final de la vida de un personaje histórico, y lo hace construyendo una cinta sobresaliente y de gran calidad cinematográfica. Recomendable por su dirección, guion, interpretaciones, fotografía, música, montaje, planos, vestuarios, caracterizaciones y narrativa subtitulada que convierten a La pasión de Juana de Arco, en uno de los films históricos imprescindibles en la historia del cine, y que cautivará a los cinéfilos más exigentes.

PUNTUACIÓN DEL CINE DE RAMÓN 9 SOBRE 10