Moffie (2019)

mofe

Oliver Hermanus nos trae un drama basado en la homosexualidad de lo más convincente al exponer esta condición sexual en el ejército, y además en el ejercito de Sudáfrica a principio de los años 80, donde el racismo y el machismo era el pan de cada día en un país en el que las diferencias raciales eran las más pronunciadas del momento. Y lo hace de forma notable Oliver Hermanus, aún con su corta experiencia fílmica, ya que lo que en él nos muestra es verosímil y además lo va manifestando poco a poco, sin tener prisas y dejando entrever en todo momento lo que se va cociendo en la trama. 

Las interpretaciones son idóneas para lo que el director busca de ellas. Cuenta sobre todo con el acertado trabajo de Kai Luke Brummer y también de Ryan de Villiers entre otros. Los planos y movimientos de cámara son inteligentes y exprimen lo mejor de las interpretaciones. Los vestuarios y decorados son sugerentes y te transportan el momento y lugar en cuestión. La fotografía también es evocadora y estéticamente esta bien elaborada. Pero de los detalles técnicos de Moffie lo que más merece la pena destacar es la música y los sonidos gracias al trabajo de Braam du Toit, que consigue acompañar magistralmente la trama al lograr un estimulante trabajo que puede inquietar, apaciguar o entristecer según es requerido en la escena. 

El guion escrito por el mismo director junto con Jack Sidey, no solo es realista sino que también es justo al mostrar lo que los jóvenes homosexuales han debido pasar en los servicios militares obligatorios, al ser estos siempre de corte machista y poco transigentes aparte de lo que les enseñan. Muestra hábilmente como el ejercito envilece y por supuesto embrutece a los militares, despojándolos de toda opinión propia y sometiéndolos a castigos despreciables que hace que se odien los unos al otros, y que muchos incluso no consigan superarlo, dejando sus vidas en el camino. 

Considero por tanto que Moffie es un film recomendable, por ser un grito a la libertad de expresión, por ser una llamada al público a saber lo que han tenido que soportar los homosexuales en sectores de corte tan machista como lo puede ser un ejército, y más aún en épocas pasadas. Y sirve además, para darnos cuenta que algo que viene implícito en nuestro ser no puede ser despojado, y es más, jamas se puede tratar de cambiarlo, ya que nada nos da derecho a ello y es un papel que a nadie le pertenece, ni siquiera a ellos mismos les toca decidir si lo quieren o no lo quieren ser. Es sencillamente, algo innato en el ser humano.

PUNTUACIÓN DEL CINE DE RAMÓN 7 SOBRE 10

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *